La receta que aprenderemos a preparar el día de hoy es una muy versátil. Se trata de unos poros rellenos con pollo que bien pueden llevar otro tipo de carne si el pollo no es de tu preferencia.
Estos poros rellenos pueden ser una excelente entrada si son servidos solos y también pueden convertirse en el acompañamiento ideal de un plato de fondo y, por si fuese poco, puede ser el plato principal si es acompañado por arroz.
¿Quieres aprender a preparar esta receta? ¡Comencemos!
Ingredientes:
- 1 poro fresco
- 2 tomates medianos
- 300 gramos de carne molida de pollo
- 1 taza de caldo de pollo
- 3 cdas. de cebolla picada en cuadros
- 3 cdas. de perejil finamente picado
- Media cdta. de canela
- Media cdta. de paprika en polvo
- 1 huevo
- Aceite, sal y pimienta al gusto
Preparación:
- Cocer en agua hirviendo el poro hasta que tenga una consistencia suave. Cuando esto suceda, retirar y cortar en tres separando las capas superiores.
- Batir el huevo hasta conseguir que la clara y la yema se integren de forma muy ligera.
- En un recipiente, mezclar la carne molida con la cebolla y el perejil, sazonar y homogenizar la mezcla.
- Rellenar las capas de poro con la mezcla y pasarlas inmediatamente por el huevo batido.
- Sellar los rollitos de poro en una sartén con aceite previamente calentado.
- Licuar los tomates junto con la canela y paprika agregando caldo de pollo hasta que tenga una consistencia de salsa.
- Verter la salsa sobre los rollitos y terminar de cocinar en una cacerola por aproximadamente 15 minutos.